Nuestra Teniente Coronel de la reserva activa del Ejército Nacional, nutricionista de profesión, nos comparte clips breves sobre alimentación y hábitos saludables. Además, nos habla sobre sus diversos roles en el ámbito militar, profesional y familiar.
El Comando General de las Fuerzas Militares de Colombia, a través de la Dirección General de Sanidad Militar, fomenta hábitos para una alimentación adecuada y balanceada, en función de las responsabilidades y competencias de cada una de las Fuerzas, tanto para el personal uniformado como para los civiles, así como para la población de veteranos y pensionados.
Con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, el Comando General destaca el papel fundamental de la nutrición en la salud de los uniformados y civiles, a través de una entrevista con la nutricionista Julia Graciela Correa, quien desempeña diversos roles: militar, nutricionista, madre, esposa, hija y hermana. En su trabajo, enfrenta el reto constante de enseñar a alimentar para la vida.
Desde hace más de 27 años, Julia ha estudiado el funcionamiento del cuerpo humano y el impacto de los diferentes alimentos, creando una sinergia perfecta que garantiza la energía necesaria en cada etapa de la vida, así como la salud y el bienestar del ser humano.
Su primera experiencia como nutricionista fue apoyando a mujeres en una reconocida agencia de modelos en Bogotá, lo que le permitió adquirir conocimientos sobre patologías derivadas de una mala alimentación. En 1998, decidió aplicar este conocimiento en la institución castrense, ingresando como Oficial del Cuerpo Administrativo del Ejército Nacional.
Los 21 años que ha pasado en el Ejército le han permitido comprender las dinámicas alimenticias de las unidades militares, así como las particularidades y desafíos nutricionales en el ámbito operacional. Reconoce que ha sido un desafío lleno de pasión, adaptando los hábitos alimenticios en los hogares de los soldados a los requerimientos nutricionales y las posibilidades del contexto militar.

A lo largo de los años, sus roles como mujer, profesional y militar fueron expandiéndose, incluyendo el papel de esposa y madre de dos hijos, María Angélica y Juan Sebastián. Su esposo, también militar, se ha convertido en el pilar fundamental que le ha dado la fortaleza para afrontar todos sus roles con dedicación, disciplina y amor. "Es complicado, pero hay que organizarse. El apoyo de mi esposo ha sido clave para llegar hasta donde estamos hoy como familia", menciona.
Recuerda con cariño cómo, a pesar de la distancia, ella y su esposo compartían conversaciones sobre cada etapa de crecimiento de sus hijos, incorporando nuevos alimentos a sus dietas, lo que contribuyó a su desarrollo físico y a la consolidación de hábitos saludables en su vida cotidiana.
Hoy, desde la Dirección General de Sanidad Militar, como nutricionista, sigue transmitiendo sus conocimientos a los soldados, tanto de tierra, mar, río y aire, como a sus familias, para fortalecer y mantener en la agenda de cada hogar militar buenos hábitos de alimentación, actividad física y bienestar mental. Sin importar el rol que desempeñe, su misión sigue siendo la misma: enseñar a alimentar para la vida.
Autor: Comunicaciones Estratégicas COGFM